San José, el humilde esposo de María y padre adoptivo de Jesús, ha sido durante siglos un santo discreto, pero fundamental en la historia de la salvación. En los últimos años, su devoción ha crecido, especialmente tras el Año de San José proclamado por el Papa Francisco y la película “Con Corazón de Padre”.
Uno de los lugares donde su presencia se siente con más fuerza es en Argentina, donde un grupo de religiosas ha asumido la misión de ser Guardianas del Guardián, cuidando un santuario y guiando a los peregrinos en un encuentro profundo con San José.
La Congregación Mat Day, con más de 25 años de existencia, llegó en 2019 a este santuario con una misión especial: ser guardianas de San José.
Este lugar no es un destino turístico ni un sitio lleno de ornamentos. Es un santuario escondido en medio de la naturaleza, donde el silencio invita a una experiencia de fe profunda.
“Si vienes con los ojos humanos, no encontrarás nada. Pero si vienes con los ojos de la fe, lo encontrarás todo.”
Los peregrinos que han visitado este lugar han experimentado encuentros espirituales profundos con San José, en un ambiente de recogimiento y oración.
Desde su llegada, el santuario ha recibido peregrinos de España, Italia, Alemania, Venezuela y Estados Unidos, muchos de ellos inspirados por la película “Con Corazón de Padre”.
“San José te llama, igual que lo hace la Virgen. Muchos llegamos aquí con una petición especial, y encontramos respuestas.”
Una de las devociones más populares en este lugar es la Treintena de San José, una oración de 30 días recomendada por Santa Teresa de Jesús para obtener favores especiales.
San José no solo es el patrono de la Iglesia Universal, sino también modelo para los trabajadores, padres de familia y hombres de fe.
“Los jóvenes tienen como modelos a futbolistas o celebridades, pero ¿qué ejemplo tienen los hombres y padres de familia? San José es el modelo perfecto.”
Este santuario ha inspirado la creación de un nuevo apostolado llamado “Virutas de San José”, que busca fortalecer el papel de los esposos y padres de familia a través del ejemplo de San José.
En 1660, un pastor llamado Gaspar Ricard se encontraba al borde de la muerte por falta de agua. De repente, un hombre de imponente presencia se le apareció y le dijo:
“Soy José. Mueve la roca y beberás.”
Gaspar, sin fuerzas, dudó, pero finalmente empujó la roca y brotó agua. Cuando intentaron mover la misma roca, necesitaron diez personas para hacerlo.
Además, un hombre ciego que se lavó con esta agua recobró la vista de inmediato. Estos eventos marcaron el inicio de este lugar como sitio de peregrinación.
San José no realizó milagros públicos ni predicó en plazas, pero fue el maestro del silencio y la vida interior.
“San José nos invita a mover las rocas de nuestra vida, a dejar atrás lo que nos impide recibir la gracia de Dios.”
El agua del milagro representa la vida de gracia y unión con Dios. San José nos enseña a romper barreras internas y confiar en la voluntad divina.
San José es patrono de muchas realidades dentro de la Iglesia:
• Patrono de los trabajadores 🛠️
• Patrono de las familias 👨👩👧👦
• Patrono de la vida interior 🙏
• Patrono de los agonizantes ⚰️
“Hoy más que nunca, San José es el patrono que los varones y padres de familia necesitan. En una sociedad donde la figura paterna se ha debilitado, él nos enseña cómo ser verdaderos padres y esposos.”
Uno de los testimonios más impactantes es el de una mujer que, al llegar al santuario, escuchó en su interior la frase:
“Soy tu padre. Perdona a tu papá.”
Este mensaje le permitió sanar una relación rota con su padre, demostrando el poder de San José para restaurar corazones.
“Cuando llegas aquí, no esperes ver una gran basílica o un santuario imponente. Aquí todo es sencillo, como San José.”
Los peregrinos descubren que San José no necesita grandes monumentos para manifestarse. Su humildad y sencillez son precisamente lo que lo hace tan cercano y poderoso.
“Aquí, lejos del ruido del mundo, me he sentido verdaderamente amado por Dios, gracias a San José.”
Uno de los títulos más impactantes de San José es “Terror de los Demonios”. En este santuario, muchas personas han sentido su poderosa intercesión en la lucha contra las tentaciones y ataques espirituales.
“San Miguel Arcángel es poderoso, pero San José es su terror. No hay demonio que no tiemble ante su presencia.”
Muchos peregrinos han sentido que San José les da fuerza y valentía para enfrentar sus desafíos espirituales y personales.
Si aún no has tenido un encuentro profundo con San José, este es el momento.
“San José nos dice: ‘Soy José, mueve la roca y beberás.’ Solo necesitamos confiar en él y en Dios.”
Este santuario en Argentina no es solo un lugar de peregrinación, sino un espacio de transformación espiritual.
San José, terror de los demonios, ruega por nosotros.